Hamilton, el Zar de Rusia

Con una gran puesta en escena y el total apoyo de todos hacia la figura de Jules Bianchi, después de cien años, se ha vuelto a celebrar un gran premio en tierras de la Federación Rusa. Despliegue de medios en un lugar ya señalado y conocido por los últimos JJ.OO. de invierno celebrados en Sochi. Una nueva pista diseñada por Hermann Tilke que, como otras, se ha definido anodina, con poco interés para el espectador y de la que se esperaba algo mas de las curvas 2 y 13. En esta última, mucho corazón hay que poner para adelantar a un rival antes de la chicane, cuando se viene de un fuerte cambio de apoyo, al termino de una falsa recta.

La carrera ha ofrecido pocas cosas de interés, salvando las dos primeras vueltas, debido precisamente a las características del trazado y aunque todo era nuevo y por descubrir, solo las gomas han dejado entrever que la elección de Pirelli no ha sido la más correcta. No es muy normal ver a un coche hacer todo el GP con el mismo juego de neumáticos, que es lo que ha hecho Rosberg al cambiar después de la primera vuelta, el juego de neumáticos que había sacado y que había malogrado en la fuerte frenada de la curva 2, al querer arrebatar la posición a su compañero. Los compuestos blando y súper blando hubieran, sin duda, dado mejor juego y eso ya se vio desde los libres, donde se seguían bajando los tiempos a pesar de rodar cada vez mas vueltas con las mismas gomas.

Nada de interés en los Mercedes, salvo la consecución del titulo de constructores a falta de tres pruebas para el final. El dominio es tan brutal sobre el resto de los coches de la parrilla, que ni siquiera el buen papel del Williams de Valteri Bottas, acaba por dar interés. Los Williams son capaces de hacerse ver, si el circuito es de potencia, donde la importancia de la unidad Mercedes es mas relevante. Muy digno papel han hecho también los McLaren, que han acabado cuarto y quinto igualmente favorecidos por su unidad de potencia. Otras veces han sido los Red Bull, los que se han asomado a los puestos de cabeza, incluso Ricciardo se ha subido a lo más alto del cajón este año y se ha mostrado como potencial rival de los de Brackley este año, pero en este circuito, los Red Bull han vuelto a sufrir y han acabado por detrás del Ferrari de Alonso.

Pocas sensaciones las que nos ha dejado este circuito que para la próxima temporada tendrá que poner en valor la importancia de unos neumáticos que den mas juego en la batalla por la estrategia. Próxima cita Austin

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