El Gran Premio de las Américas celebrado en Austin este fin de semana, nos dejo agua a raudales, tanta que la FIA decidió suspender la segunda sesión de libres y la clasificación del sábado, de modo que esta última se tuvo que celebrar, prácticamente en las mismas condiciones, el mismo día de la carrera; sin embargo a la hora de celebrar la prueba la lluvia había cedido y la salida se dio de la manera habitual, con semáforos, pero con todos los coches calzando neumáticos intermedios para poder abordar las primeras vueltas.
Los McLaren parece que han superado esa etapa negra en la que solo podían aspirar a estar por delante de los Manor y durante este fin de semana se les ha visto pelear con el grupo del resto de los mortales. Es cierto que había agua en pista y eso podía favorecer a los de Woking en manos de sus dos experimentados pilotos, pero lo que es cierto también, es que una vez los coches calzaron los slicks, tuvimos ocasión de verlos en plena competencia con el grupo de los que aspiran a puntuar. Ambos pilotos llegaron a rodar quintos y Button consiguió al final colocar su coche en séptima posición. Alonso que en la primera curva tuvo un toque con Massa que le relego al último puesto, estuvo cerca de acabar sexto de no ser porque en las últimas vueltas su coche tuvo un problema eléctrico que le resto potencia, aunque bien es verdad que el estado de sus gomas de cara a las últimas vueltas, no le habrían permitido defenderse de los ataques de sus rivales mas cercanos.
La carrera resulto ser una de las mejores del año y nos permitió ver a los dos Red Bull achuchando a los Mercedes durante la primera parte de la carrera cuando todavía había agua y el chasis de los de Milton Keynes les daba ese punto de imbatibilidad que todavía permanece en sus coches. Hamilton sufrió, primero con los RBR y luego con su compañero Nico Rosberg, pero también peleó como un campeón y en la fase final de la carrera sometió a su compañero a tal presión que este acabo por cometer un error cediendo la posición al que a la postre se convertiría en el campeón de este año. Vettel, que salía decimoquinto por penalizar diez posiciones al haber estrenado nuevo motor para esta carrera, acabó tercero y muy cerca del segundo Mercedes de tal manera que si hubiera conseguido sobrepasarlo, Hamilton hubiera tenido que posponer la celebración del titulo hasta la siguiente carrera.
La FIA debe llevarse un toque de atención por la masiva cantidad de decisiones dudosas a las que nos sometió durante todo el fin de semana; las que tuvieron que ver con la suspensión de algunas pruebas y las que tienen que ver con la indicación de VSC y sus normas de actuación.
Tres pruebas quedan para cerrar este campeonato. Confiemos en que lo visto en Austin no sea un espejismo para los McLaren y acaben la temporada metidos en el grupo y peleando codo a codo con el resto de sus rivales.