Lo que vimos ayer en el circuito de Hungaroring, fue una carrera loca marcada por los incidentes y las penalizaciones con lo que el espectáculo estuvo garantizado desde la salida hasta la bandera a cuadros.
Los dos Mercedes salían desde la primera fila, como ya viene siendo habitual a lo largo de este campeonato, sin embargo salieron mal y primero el Ferrari de Vettel y más tarde el de Raikkonen, los relegaron a su cola después de la curva dos. Hamilton, que es capaz de lo mejor y de lo peor en un mismo día, pago cara su agresividad y se fue por la puzolana en el primer ataque que quiso hacerle a su propio compañero con lo que como se trataba de los primeros compases de la carrera, se vio relegado al décimo lugar, posición en la que no acostumbra a rodar esta temporada. Veintinueve vueltas le costó volver a ponerse detrás de su compañero en cuarto lugar, aunque ahora un incidente con Ricciardo a la vuelta del safety car provocado por Hulkenberg ,le rompió el alerón y acabo de nuevo por detrás de los diez primeros y más concretamente en decimotercer lugar. A partir de ahí, el mejor Hamilton, penitente y trabajador realizo una magnifica remontada que le llevo hasta la sexta posición en las diecisiete vueltas que quedaban de carrera.
Por delante, Kimi terminó aliado con la mala suerte que le acompaña este año para acabar abandonando en la vuelta cincuenta y dos y Bottas, con problemas en la cuarenta y nueve, se fue a las posiciones traseras cuando estaba rodando sexto.
Rosberg eligió mal el último juego de neumáticos y Ricciardo con los más blandos, acabó por alcanzarle y en una la curva una, tras una pasada de frenada, tocó la rueda trasera del alemán una vez que había conseguido llevar el coche a la trazada correcta y le ocasionó un pinchazo que acabó por relegarlo hasta la decima posición a solo cuatro vueltas del final.
Alonso sacó petróleo de todo esto, aunque es cierto que su monoplaza rodó con los demás e incluso protagonizó algunos lances de maestro. Lo cierto es que sus buenas manos le acabaron llevando hasta la quinta posición sumando así diez puntos hasta ahora inimaginables a tenor del comportamiento habido de los dos McLaren durante toda esta temporada. Parece que el tema fiabilidad está superado y a partir de ahora una entrega progresiva de potencia, por supuesto con todo el cuidado del mundo, puede ser que nos muestre a los de Woking entre los diez primeros de manera habitual. Tiempo al tiempo y sin prisas. La temporada ya está sentenciada y lo que hace falta es trabajar de cara al próximo año para no volver a repetir las escenas vividas en carreras pasadas.
La carrera acabo ganándola Vettel que rodo en cabeza desde la primera vuelta y el podio lo completaron un dúo de “Danieles”, Kvyat y Ricciardo por este orden, quienes pusieron de manifiesto el buen estado de sus monoplazas en este tipo de circuitos.